martes, 19 de junio de 2007

Una previa de luna copera: 5 de 8 en la Libertadores

El club atlético Boca Juniors es considerado el mejor equipo de América y uno de los mejores del mundo, tanto por sus títulos internacionales, por su presencia en finales importantes, su lucha en cada encuentro disputado y principalmente, su fiel hinchada y el estadio La Bombonera que se mueve cada vez que el grito de los simpatizantes rebota de lado a lado.

El conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo ya siente adueñarse de la edición 2007 de la Copa Libertadores y no es para menos ya que, obviando el resultado del partido de ida, Boca disputó ocho finales de las cuales ganó cinco y perdió tres; en cambio Gremio jugó la instancia final en dos oportunidades ganando una (1995) y perdiendo la otra (1984).

Es hora de explicar por qué Boca es considerado un grande de América…

En 1963, Boca llegaba a su primer final de la Copa Libertadores en su cuarta edición y debió enfrentar a la potencia americana y además, el último campeón, el Santos de Pelé. El equipo brasileño se superpuso al juego que propusieron los boquenses Marzolini, Sanfilippo, Rattín, Grillo, Rojas, entre otros y vencieron en las dos finales, 3-2 en Brasil (4/9) y 2-1 en Buenos Aires (11/9).

Catorce años después (1977), ya con el Toto Lorenzo en el banco, los xeneizes llegaban por segunda vez a la última instancia y se repitió un dificilísimo equipo brasileño: Cruzeiro. Los encuentros del 6/9 en La Boca y el 11/9 en el Mineirao de Belo Horizonte terminaron 1 a 0 con un triunfo como local para sendas partes lo que obligó un tercer partido en el Centenario de Montevideo (14/9); allí, las manos de Hugo Orlando Gatti se interpusieron ante el remate de Vanderley para vencer por penales 5 a 4 después de noventa minutos sin romper el cero. Boca se coronaba por primera vez.

En la Libertadores de 1978, otra vez la azul y oro alcanzó el último escalón de la copa y fue inobjetable la calidad y la clase que le regalaron a los espectadores y a los jugadores de Deportivo Cali de Colombia: fue 0-0 en el país cafetero (23/11) y 4-0 en el Camilo Cichero (28/11).

No obstante, no había conformidad y se buscó el tri que había conseguido Estudiantes de La Plata (ediciones 1968 a 1970) y acercarse al tetra consecutivo de Independiente (de 1972 a 1976). Llegó a disputar la final frente a Olimpia de Paraguay pero lamentablemente no se pudo remontar el 0-2 que los guaraníes había logrado en el Defensores del Chaco (22/7); el encuentro de “La bombonera” finalizó 0-0 (27/7).

El 13 y 21 de junio de 2000, el equipo dirigido por Carlos Bianchi disputó los partidos definitorios para adueñarse de la tierra américo-futbolera, con una defensa sólida y una figura excluyente por cada final: en la ida en Buenos Aires, dos goles de Arruabarrena salvaron la ropa frente a un Palmeiras que llevaba en el pecho la certeza de una vuelta a su país con gloria tras el 2 a 2 y la seguridad de alcanzar una nueva consagración; pero en el Morumbí de San Pablo, el griterío de los verdes pasaron a silencio cuando, luego de un 0 a 0, el arquero colombiano de Boca, Oscar Córdoba, le tapó los remates al Tino Asprilla y Roque Pérez para darle la victoria a los argentinos por penales 4 a 2 y volver a alzar la copa.

El segundo bicampeonato llegó con la misma columna vertebral que el último año, con Córdoba, Hugo Ibarra, Jorge Bermúdez y Juan Román Riquelme como pilares; era una nueva final y en frente, Cruz Azul de México. Las cosas se dieron muy llamativas debido a los resultados malos que obtuvieron ambos equipos jugando como local. La ida en el Estadio Azteca (20/6), los locales no salieron al ataque y el batacazo se los dio Marcelo Delgado, para que Boca gane 1 a 0 y llegar confiados a “La Bombonera”; pero los de Bianchi “se durmieron en los laureles” y está vez, con gol de Palencia, los mexicanos forzaron los penales: nuevamente la suerte para los xeneizes y en esta oportunidad, ganó Boca 3 a 1 (28/6).

En la edición 2003 Boca fue una máquina que se llevó por delante a los brasileños del Santos en una final que alimentó un gran currículum; fueron dos victorias, fue la quinta Libertadores. En el Alberto J. Armando el héroe de la final, Marcelo Delgado anotó dos goles para la victoria 2 a 0 (25/6); ya en Brasil, con goles de Carlos Tévez, Delgado nuevamente y el Flaco Schiavi de penal sentenciaron el encuentro al 3 a 1 (2/7).

La historia marcaba a un Boca superior tanto en experiencia en finales y en penales pero en 2004, la cenicienta de Once Caldas de Colombia deseaba arrebatarle la supremacía americana, por eso en la primer final en Argentina los colombianos dejaron la vida para rescatar un 0 a 0 (23/6); el 1 de julio en Manizales los cafeteros llenaron el estadio y prepararon una fiesta que se inició con la apertura del marcador tras un golazo de Viáfara, pero en el segundo tiempo, Burdisso empardó el marcador y dio origen al miedo de los rivales boquenses: los penales. Algún día la suerte se tuvo que cortar y entre los malos remates de Boca y el arquero Henao dejaron a los argentinos con nada, finalizando la definición 2 a 0; para colmo, en vano fueron los dos penales atajados por Roberto Abbondanzieri.

Boca marcó en su historia el camino de cómo se debe disputar una final, jugando bien o mal, siempre con la garra de los hombres que la visten. Ahora llegó el momento de saber si confirmará la goleada por 3 a 0 ante el Gremio en la presente edición y así llevar a su casa la copa con una nueva chapa: Boca, Campeón de la Copa Libertadores. Edición 2007.

Por Jorge Gonzalez

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola chicoss, me llamo Clara y vivo en Urquiza.

Soy una fiel oyente de Arinfo y de 4 en el fondo. Aguante!!!

Jorge: me re gustó tu nota.

La verdad es que todos escriben muy bien y además hacen un gran programa

los felicto!!!